miércoles, 18 de junio de 2014

“BLOW UP” EN LA MEJICANA


En varias ocasiones llegamos a lo más alto de la antigua mina de plata y cobre La Mejicana, cerca de Chilecito.

Un cablecarril largo llega hasta las bocaminas. Es una excursión apasionante por un itinerario sobrecogedor entre montañas.

Para un viaje probando una Montero Nativa llegamos un buen día acompañados por un circunstancial amigo francés. No estaban nuestros amigos Abel y Roberto que encontramos otras veces lavando oro junto al río amarillo.

Nuestros amigos lavando oro



Pero el paisaje estaba tan hermoso como siempre, en particular en el pasaje donde se pasa por la Mina de Ocre,

Subiendo al Famatina al pasar por la Mina de Ocre

Fue en este viaje a La Mejicana que nos sucedió algo que denomino “Blow up” en recuerdo de aquella película donde un fotógrafo de modelos, después de una sesión de fotos en un bosque, descubre en el laboratorio algo raro y, para detectar de qué se trata, confecciona una serie de sucesivas ampliaciones (“blow up” en inglés) hasta percatarse que en las placas aparecía entre los árboles la escena de un asesinato que él, el fotógrafo, no había observado mientras estaba trabajando.

Instantánea del improvisado bautismo del pequeño Cristián, en el puesto del paraje Los Berros




La foto social del bautismo a 3000 m de altura en el puesto Los Berros. Los personajes: Sebastién, Marlú con su ahijado Cristián, doña Luisa, y Margarita, la madre del párvulo

Éramos en esa oportunidad: Marlú, un ocasional amigo francés, Sebastién,  y el autor.

Subimos hasta la Estación 9 con tiempo espléndido, y al bajar nos detuvimos brevemente en Los Berros junto a la única vivienda habitada en todo el largo trayecto entre Los Corrales y La Mejicana.

El puesto era ocupado por la señora Luisa Gaitán y su hija Margarita, madre de una preciosa guagua de seis meses. Paramos y le entregamos a la dueña de casa una bolsa con ropa.

En esto, doña Luisa nos sorprende diciendo que en su casita conservaba una botellita con agua bendita y con la pregunta de si estábamos “dispuestos a bautizar su nieto con el nombre de Cristián”.   

Después de haber ampliado la foto y mirando la escena con detenimiento y una lupa, varios días más tarde Marlú descubrió que la madre llevaba un cuchillo filoso y puntudo en su mano

 
Aceptamos e improvisamos una breve ceremonia de bautismo, con Marlú como madrina. Después de tomar algunas fotos sociales nos despedimos deseándoles suerte a nuestros amigos y nos fuimos.

Días después, ya de regreso en casa, reveladas las películas y ampliados los prints, una noche Marlú estaba ordenando las fotos cuando para su sorpresa observa algo que no habíamos visto durante la breve sesión fotográfica: que Margarita, la madre, aparece con un filoso cuchillo de cocina en la mano izquierda, medio escondida pero bien visible.

No recordábamos que la joven estuviere en esos momentos pelando papas o realizando otra tarea doméstica. Y después de evaluar varias posibilidades arribamos a la conclusión de que tal vez Margarita temía que su madre, la abuela de Cristián, tuviese la intención de entregarnos el bebé como criado, simplemente para darle un mejor destino.

Es un razonamiento, nada más. Pero allí quedó la placa impresa como testimonio de un momento dramático que vivimos sin habernos percatado de la situación.

 

La película de Antonioni

 

París - El realizador italiano Michelangelo Antonioni, quien murió ayer en Roma, se dio a conocer mundialmente en 1967 al ganar el máximo galardón del Festival de cine de Cannes con Blow up, inspirada en un cuento del escritor Julio Cortázar, Las babas del diablo.

Esta película, producida por Carlo Ponti, fue rodada en inglés por Antonioni y cuenta la historia de un fotógrafo, interpretado por David Hemmings, que se ve envuelto en un caso de asesinato. También trabaja en ella Vanessa Redgrave.

La intriga del cuento de Cortázar Las babas del diablo, escrito en 1959 e incluido en el libro Las armas secretas, narra la historia de Roberto Michel, un traductor franco-chileno, residente en París, aficionado a la fotografía, que toma una foto accidentalmente en un parque a una mujer que besa a un adolescente.

"Entre las muchas maneras de combatir la nada, una de las mejores es sacar fotografías, actividad que debería enseñarse tempranamente a los niños pues exige disciplina, educación estética, buen ojo y dedos seguros. No se trata de estar acechando la mentira como cualquier reportero, y atrapar la estúpida silueta del persone que sale del número 10 de Downing Street", dice el narrador de este cuento.

Ponti compró por 4.000 dólares a Julio Cortázar los derechos de autor de su cuento. "Por 'Blow up', ese genio de las finanzas modernas que es Carlo Ponti me ofreció y yo acepté, 4.000 dólares; ellos ganaron 25 millones con la película. Eso no tiene ninguna importancia. El resultado es que Antonioni hizo una admirable película y él se dio el gusto", dijo Cortázar en una entrevista de 1973 con Hugo Guerrero, publicada en la Revista Siete Días de Buenos Aires.

Según el crítico Guillermo Arias, en la revista internet de cine Feedback-zine, 'Blow up' es un film íntimamente ligado al tiempo en el que fue hecho: Londres, mediados de los 60, basado en un cuento de Julio Cortázar que cuestiona el poder de la veracidad de la imagen a través de la historia de un fotógrafo que asegura porder resolver el enigma de un crimen a partir del análisis de una serie de fotografías que él había realizado y que amplía sucesivamente".

"Necesitaré al menos otra película para explicar Blow up", declaró Antonioni en la rueda de prensa del Festival de Cannes, en mayo de 1967, tras ganar la Palma de Oro. Arias cita unas declaraciones de Antonioni del 12 de febrero de 1982 en el Corriere della Sera.

"La mayor dificultad con la que me he encontrado ha sido la de representar la violencia de la realidad. Los colores embellecidos y edulcorados son a menudo los que parecen más duros y agresivos. En 'Blow up', el erotismo ocupa un lugar de máxima importancia, pero, a menudo, se pone el acento en una sensualidad fría, calculada. Los rasgos de exhibicionismo y de voyerismo están especialmente subrayados: la joven mujer del parque se desnuda y ofrece su cuerpo al fotógrafo a cambio de los negativos que tanto desea recuperar".

 La película de Antonioni tuvo mucho éxito, "despertó gran interés e hizo que la gente empezara a leer mis cuentos", declaró Cortázar, quien la vio "como un espectador cualquiera... estaba en Amsterdam, un día de lluvia; estrenaban 'Blow up', pagué mi entrada y la vi. Me gustó mucho".

1 comentario:

  1. No es una teoría descabellada lo del blow up!!!
    Abrazo
    Axel.
    Pd. Cuánto escribiste.. me tuve que poner al día.

    ResponderBorrar